sábado, mayo 29

Vuelta a mi primer Cioran - Savater [fragmento]

Porque entonces yo acababa de emprender nada menos que toda una tesis doctoral sobre Cioran, paradójico cumplimiento de aquel propósito inicial -el primero de mi vida literaria- consistente en centrar sobre su obra el más personal y arrebatador de los libros. La decisión de escribir una tesis ya resultaba en sí misma de rango heroico y a la vez humillante: se trataba de acatar el rito iniciático que podía resultarme más opuesto para tener derecho a formar parte de la tribu a la que menos deseaba pertenecer. Dicho sea de una vez por todas: me desagrada la seriedad académica de los profesores de filosofía y de sus alevines, la timorata y pretenciosa suficiencia de sus asideros bio-bibliográficos, sus notas a pie de página, sus incomprensibles rencillas de tarados, su enemistad gruñona con todo lo que reluce... Sigo pensando lo mismo hoy que ya soy uno de ellos (aunque nunca me han reconocido del todo como un de los suyos, favor que me hacen, porque para mi vergüenza sé muy bien lo que soy) que cuando tenía dieciocho años odiaba hasta el ridículo retintín bizantino de la palabra catedrático.

Fernando Savater, Despierta y lee (México: Alfaguara, 1999): 230-31.